jueves, 26 de enero de 2012

Circo


Crea el circo para mis equívocos miserables,
construye la barca para mi escape
 a tus dominios tempestuosos,
comienza a urdir mi ataúd de tallo y palma,
quema los signos de mi dolor callado,
compra una cornucopia al extranjero de la esquina
y podrás comer a mi lado los últimos días.
Déjame estar en tu pecho,
entre tus manos sin nombre
y mi ligereza conmovida,
reúne las charlas hilarantes
atrincheradas en este cerebro,
manda al diablo el incómodo desenlace,
permite que mi demencia
copule con la pasión del medio día
y que la orgía detone a la luz de tus secretos.
Explícame luego cómo
caíste de este lado del mundo
y cuándo piensas ir al origen
del perpetuo misterio,
prepara el refugio que alienta
la humedad de las rocas,
que despierta el ímpetu de tu cuerpo.
Rondemos juntos el resto del año
en las calles que te saben de memoria,
que me desconocen y caigo,
corre a mi lado cuando estés tan lejos
y vuelve a escribir esta historia.


 Brenda Ramírez

miércoles, 18 de enero de 2012

Plan


He planeado llevarte lejos
de la exasperada realidad
ya tengo las directrices,
y los mapas exactos,
que te sacarán de la quimera sofocante.
Vas a internarte en mis entrañas,
tal vez nunca salgas,
voy a tenerte respirando
de mi propio aliento
que despide un hálito ansioso,
deseoso de ti,
de la falta que haces
en la marca de mi nacimiento
de la torpeza, mi torpeza,
que construye tus palabras,
ésa que te reconoce
desde que empecé a vivir.
Voy a esconderte en cualquier recoveco
donde puedas recostarte,
olvidar el salado entierro de los sueños,
la horrible celda afligida,
a los infaustos altaneros.
Deseosa, cansada,
así retendré tu cuerpo,
en el espacio más cálido que tengo.

Brenda Ramírez

martes, 17 de enero de 2012

Encontrarte


Voy a encontrarte bajo el sol de mis pestañas,
sobre las equivocaciones de  mi lengua,
en la tristeza olvidada de tus ojos,
o en  los rincones de las hormigas muertas.
Se deshará mi boca en rotos lamentos
después desollaré mi memoria,
mientras retuerces el  hueco de mi infancia
y carcomes  los muros de la distancia,
en cualquier olvido voy a encontrarte.

Brenda Ramírez

Pértigas



Deja de sofocar las pértigas
que erigen mi cuerpo,
qué soez lenguaje el tuyo
para hacerme entender.
Los palos
me rompen la boca,
y cuando la luna baja,
casi podemos ver los callejones y las escaleras
que llevan al hotel de los frustrados,
de las mujerzuelas de vestido raso.
Bailan las almas de los sopranos,
y los payasos hacen mascotas para adornar
mi anticuada soledad,
sabios de fama lúgubre beben vino violeta,
sigues deshaciendo mi íntegro corazón
cual madeja mojada.
Pierdo el suelo,
se va la luna,
ya no tiene sentido apretarme tanto.


Brenda Ramírez

lunes, 16 de enero de 2012

No vas a creerme


No vas a creerme
mientras dulcemente duermes,
el tiempo y la geografía
han trazado mi castigo.
No vas a creerme
pero vomité mis posesiones más íntimas
me he quedado en la habitación ruin,
humeante de copal,
me he quedado en el rincón donde hacen fuego,
creo que moriré.

Brenda Ramírez

Rostro


No te burles
de la funda de mi rostro,
jamás he buscado ser
alguien encantador.

Las esquinas de mi boca
han terminado en vituperios,
todos se dirigen a mí.

Haré la noche eterna,
cobijaré mi delirio de inteligencia.

¡Otra vez anochece
en mi turbia cabeza!
reduciéndome a hormiga,
lanzándome a las sombras
bajo el comedor.

 Brenda Ramírez

Palabras


Se dedicó a crear palabras
nuevas y más extrañas
para hacer escurrir en los oídos
del auditorio mundano
sangre de duras ansias

Brenda Ramírez

Sobre ti


Sobre ti,
sobre tu columna
y tus pocas palabras,
hable de ti
y sobre tus cicatrices
de árbol centenario.
Aludí un poco
acerca de lo que nos preocupa,
sobre lo que debería ocuparnos,
después  metí en mi cabeza
un olor a coco que emana  de tus pliegues,
de las hendiduras que te forman,
como viejo tronco
que sirve de puente
de aquí al bosque infrahumano.
Así te miro,
naturaleza de magnitudes alucinantes,
sobre ti hablo,
sobre ti me encuentro.

 Brenda Ramírez

Caminarás


Caminarás sobre las piedras
que fueron mi hogar,
olerás la suerte que deja la lluvia  sobre las flores 
                                                              (esas flores que mi papá plantó años atrás).

El nido en tu corazón querrá besar el lodo 
que pisé para besarte la mejilla,
vas a empapar tu pecho de palabras salobres,
un ruido crepitante saldrá de ti
y acabará con el silencio,
rey de mi casa
donde nació nuestro encuentro.

Las ruinas evocarán mi voz
desde los agujeros donde aguardan las musarañas,
pero las flores,
¡esas que mi padre amó!
Van a tocarte otra vez el pecho.

Brenda Ramírez


viernes, 13 de enero de 2012

Olmos pétreos


Presiona mis huesos,
sólo tal vez,
halles algo en ellos.
Descanso, espero,
pero no resulta nada bien
creer en los olmos pétreos.
Tus manos largas me acompañan
y me ahorcan  las ansias,
los anhelos subyacentes
en las olas de roca.
La estatura de la infame tristeza
es absurda,pero cierta,
yo huyo como mosco
de esta enorme sombra,
pero caigo directo en tu boca.

Brenda Ramírez

Vieja tierra



Fue en tu reino molido
de triste polvo,
no de hadas ni de oro,
sólo piel resquebrajada
donde yo vagué sin frenos.
Estoy perdida,
mujeres inmensas
me ofrecieron su dorso
y me tentó su benevolencia,
pero no
            no puedo,
me absorbe el  cielo,
me disuelvo en sus extremos,
y busco tu vieja tierra.

Brenda Ramírez