viernes, 14 de junio de 2013

Con la sonrisa


Debería escribir poemas con aves que no caen
con sonrisas en los nacimientos,
familias alegres, de esas que sí hay
en los lugares oscuros de mi nación.

Tengo el alma reventada
herida pero con amor,
agrio y dulce placer que me llena
en mis planes inválidos cada mes.

Iré por ti, rescatando la alegría
—de verás, no está extinta—
lejos del dolor agudo de una tarde sin mamá
lejos del chillido destemplado
que hace eco de la soledad,
sin miedo tóxico en las calles,
iré con la sonrisa que aquí guardo.

Será parecido a mi hogar un martes a las tres
abiertos a los temblores de la tierra
a los rugidos de sus adentros,
dejaremos a nuestras palabras abrazarse.

Y apacibles en la alcoba
comeremos ciruelas del árbol viejo,
te haré nacer con mi sonrisa.

Brenda Ramírez